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Bilde
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Comunicado de prensa
El 6 de abril, el Cardenal William Levada, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, me asignó la difícil tarea de transmitir que, a fines de enero de 2009, se notificó a la Santa Sede sobre una acusación contra el obispo Georg Müller de Trondheim, por abuso sexual de una persona menor a la edad de consentimiento.
Se le solicitó a la Nunciatura en Estocolmo que investigara el caso y de qué manera se relacionaba con las leyes de Noruega. Al confrontar a Müller respecto de las acusaciones, él admitió que eran ciertas, y su solicitud de dimisión fue aceptada de inmediato. Müller niega las preguntas reiteradas sobre otros casos, y no se han presentado más víctimas ante autoridades eclesiásticas o civiles.
Aunque el caso haya prescrito conforme a las leyes de Noruega, las leyes canónicas siguen vigentes. Por esta razón, después de su dimisión, el obispo Müller se ha sometido a un tratamiento y no tiene actividades episcopales ni pastorales. La Congregación de la Fe también señala que, por deseo expreso de la víctima, quien ya ha cumplido hace tiempo la mayoría de edad, no se han divulgado los detalles del caso. La Congregación solicita que se respete el deseo de la víctima de permanecer en el anonimato.
Como sucesor del obispo Müller, no he estado involucrado en el procedimiento, ni he visto los documentos del caso. Como sucede cada vez que un obispo viola las leyes canónicas o civiles, la Congregación de la Fe es la instancia eclesiástica adecuada.
Klosterneuburg, Austria, 6 de abril de 2010
+ Bernt Eidsvig Can.Reg.
Administrador Apostólico de la prelatura de Trondheim
KI - Katolsk Informasjonstjeneste (Oslo); ad/mt (6. april 2010)